Crece el comercio informal en BCS debido a la pandemia
La Paz.-El comercio informal se ha disparado en Baja California Sur debido al cierre de negocios formales y la necesidad de ingresos de los ciudadanos, aseveró la presidenta de la Cámara de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), Julia Lorena Hinojosa Oliva.
Sostuvo que a raíz de que muchos establecimientos que proveían de bienes y servicios a la población no están laborando o lo hacen de manera limitada, y ante la pérdida del poder adquisitivo de muchas familias, se han abierto canales de venta informal que ya de por sí presentaba un porcentaje elevado.
“Hoy ha subido como la espuma la oferta de productos y servicios de personas que no pagan impuestos, y que incluso en este momento, algunos tienen más venta que nosotros los formales”, sostuvo.
Comentó que de acuerdo a reportes de las autoridades en la materia, antes de la pandemia el 56% de la población económicamente activa, vivía del comercio informal, y que a raíz de esta contingencia sanitaria, seguramente más del 60% obtiene sus ingresos de esa manera.
Lo anterior se puede ver diariamente en las redes sociales, donde muchas personas ofertan su oficio, producto o servicio al que se dedica, ya sea porque perdieron su empleo o porque el ingreso familiar se redujo considerablemente, y tienen la necesidad de recuperar su poder adquisitivo.
También se da el caso que al cerrar muchos comercios, la población que aún cuenta con un ingreso, requiere de algunos bienes y servicios, pero no hay en la formalidad quién se los proporcione y recurren a los comerciantes informales.
Por ese motivo, Julia Lorena Hinojosa lamentó que la autoridad federal haya sido tan insensible con el sector empresarial y solamente le haya pedido su colaboración ante la afectación económica de la pandemia, manteniendo sueldos y prestaciones al personal, así como el pago de impuestos y servicios, pero no se les haya dado ningún aliciente o estímulo para continuar abiertos.
Sostuvo que para los empresarios en general y específicamente entre los restauranteros, cada día significa un reto para no cerrar definitivamente, pero que cada vez son más los que dicen que ya no pueden seguir sosteniendo su empresa, por lo que se encuentran al borde de la quiebra, principalmente porque no se sabe cuándo terminará este problema. (Por: Arturo Nieves)